Diario Comunal 194: Bien vale la pena, preguntarse: ¿Para quién educan los Centro educativos actuales?.
Nos invitaron a platicar con Maestros y
estudiantes de ISIA, Institución que desempeña su labor en Jaltepec de
Candayoc, comunidad ubicada en la región Mixe baja. Es una institución, que
para nuestro criterio, está empeñada en darle vos a las comunidades
originarias, de preparar personas que fortalezcan la vida comunitaria, están
empeñados en lograr una real educación intercultural. De reciente creación,
igual que la establecida en Santa María Tlhuitoltepec, y otra licenciatura en
Alotepec, curiosamente todas Ayuuk, ha buscado programas de estudio para la
educación comunitaria en el más alto sentido de la palabra. Los tres casos, con
sus muy particulares modalidades investigan el cómo formar un profesional
comprometido con el ejercicio de las capacidades comunitarias. En los tres
casos coinciden preocupaciones en la educación y en la comunicación. Por cierto,
la Misma UABJO, a través de su Instituto de Ciencias de la educación, ha
modificado su plan de estudios, orientando su formación al ejercicio de las
capacidades comunitarias, enfoque que es Urgente, en Derecho, Medicina,
Arquitectura, Biología, etc. Si a todo esto añadimos la preocupación del
magisterio que muestra con su plan de transformación educativa (pteo), la
situación es verdaderamente sobresaliente.
No nos cabe duda, que en Oaxaca se ha tomado
mayor conciencia de que el conocimiento comunitario se ha venido cercenando o
mutilando a lo largo de los siglos y que la herramienta central para el
sometimiento y la dominación de los pueblos originarios, ha sido la Educación.
Sin embargo, creo que la intención por muchos y muy buenos argumentos que exponga,
no logra cambios reales en la dinámica educativa, la que a pesar de los cambios
de contenido, estos centros, siguen sometidos, a una dinámica enclaustrada de
su labor educativa. El enclaustramiento, no deja de ser lo clásico, se sigue
operando bajo el modelo de monasterio, de adoctrinamiento, en y para el
discurso. Formar para fortalecer la comunidad, a través del discurso no cambia
las cosas, la escuela sigue siendo un monasterio que forma al maestro para
ejercitar un discurso, de la misma manera que lo hace un cura desde el púlpito,
o del maestro en el salón de clases. Se adoctrina en el "deber ser",
no se forma a través del "deber hacer". El ser y el hacer es una
unidad, también la teoría y la práctica. Separar estas dimensiones, hacen del
ser pura teoría, que no es, resultado del hacer y de la práctica. Esta
separación se la debemos al pensamiento ajeno, el que se nos ha impuesto. Pero
el problema no queda ahí, se agranda cuando se entiende que un estudiante al
obtener su título, queda a disposición del mercado, de la búsqueda de empleo,
que para acabarla, son empleos que generan los capitales privados, (en la
medida que el Estado se lava las manos en la generación de empleos, dejando
todo a la privatización, empresarios que obviamente le reclaman al estado los
recursos naturales que administra, para generar empleos, y esos recursos los
tienen las comunidades, y pues el resultado ya sabemos; eólicos, Minas, Presas,
construcción, manufacturas,etc, se regalan a los grandes capitales con el
subsecuente ahondamiento de las desigualdades sociales. Entonces vale
preguntarnos, ¿para quien educamos? si en los mejores centros educativos
actuales, se mantiene el enclaustramiento y el adoctrinamiento, y los que
generan empleos sólo requieren de maquinas. Nuestra propuesta, es generar
empleos desde los centros educativos, por lo mismo debemos educar desde el
trabajo, a través del trabajo. Lo ampliaremos en la próxima.
Comentarios
Publicar un comentario