Diario Comunal 186: No nos cabe duda, el norte y el sur son mundos distintos.
Ayer por fin, en Amatlán pudimos ver la
película documental "El alcalde". Es la historia de un
"noble", que es "amigo de todos", formado en el dominio de
todos los placeres, que se enfrenta como Alcalde a la terrible enfermedad del
presente, "el crimen organizado". Integrante de esa clase
multimillonaria que arropa todos los supermercados, que lo mismo mata elefantes
en África, que colecciona cráneos de "Jíbaros". Tirador de
excelencia, el que por sus dotes, sus vecinos, potentados públicos, lo erigen
en protector de sus obedientes familias. Lo mismo amigo de Toledo, si el
pintor, que de Salinas de Gortari; todo un personaje. Bajado de los cielos para
mantener el orden y crear una burbuja inmune a la presencia de los
"malos". Una verdadera demostración del poder, que quiere vivir
alejado de las inmundicias, que crean y venden sus propias empresas. El
documental logra no precisar el límite entre el poder de los guapos y el poder
de los feos. Para nosotros su mensaje central es la importancia de estar
informados, cueste lo que cueste.
Nos hizo recordar la diferencia de lo que
sucede con esto en los Estados del sur, principalmente Michoacan y Guerrero.
Por estos lados, quienes se han levantado, sin matar elefantes ni coleccionar
cráneos, son los de abajo, la gente común que no encuentra salida a la
extorsión, a la violación, al asesinato de familias enteras. No tiene armas de
alto poder, pero mínimamente usan y conocen la 22, pero eso si, lo hacen en
colectivo, lo deciden en asambleas, y se auto -denominan policías comunitarias,
o grupos de autodefensa, a quienes no les queda otra, que defender con su vida
lo que consideran suyo. La diferencia que parece evidente, es que el norte es
un individuo, y en el sur, son colectivos, obviamente con diferente formación y
ubicación en la estructura económica, Como lo señalan sus espacios, los de
arriba en el norte, los de abajo en el sur, todo esto suena muy curioso, pero
revela con mucha claridad los dos México. Los que están arriba y los que están
abajo.
En ambas regiones se padece la misma
enfermedad, pero se trata de exterminar con sus propias armas, los de arriba
con su poder, vinculado a las grandes empresas transnacionales, y en el sur,
con su organización vinculado a su conocimiento ancestral colectivista.
Nos llamó la atención también, que el
documental tuviera tres directores, no uno como es lo clásico. Será que los
directores tiene más influencia del sur, si esto es así, faltaría que un sólo
director se atreviera a conocer la experiencia de autodefensa que se está dando
en el sur, para completar el circulo mágico que dibuja el conocer el poder
desde dentro.
Creo que mucho se puede aprender del ejercicio
del poder verticalmente evidenciado, pero también mucho mayor sería conocer el
ejercicio del poder horizontalmente comprobado. Independientemente del grado de
enfermedad que se padezca en el norte o en el sur.
Comentarios
Publicar un comentario