Diario Comuna 49: El magisterio es la única fuerza política integrada en Oaxaca.

El poder gubernamental siempre ha pasado de mano en mano de grupúsculos, que se auto nombran partidos, que a recientes fechas se manifiestan como simples mafias en la búsqueda de poder y dinero. La mayoría piensa,en si el pri o el prd o el pan, en si es de derecha o de izquierda, y a la hora de los hechos nadie entiende que es lo que pasa. Vale la pena preguntarse, ¿quien realmente gobierna en Oaxaca?. Si gobernar es manejar el dinero que producen los Oaxaqueños y el que le llega de la federación y de otras instancias, entonces estamos gobernados por mafias, integradas de grupúsculos. Pero aquí esta la cuestión. Resulta que hasta la comunidad más pequeñita padece o recibe las gracias de un maestro. 75 000 maestros están diseminados en todo el estado, una buena parte de ellos se concentran en las ciudades, y otra buena parte en la Ciudad de Oaxaca. Si el magisterio fuera un partido político, éste tendría representantes en todo Oaxaca. Un partido, de personas con salario, que si quisieran, podrían asesorar, orientar, conducir, las mejores causas y demandas de la sociedad Oaxaqueña. En buena parte lo hacen, en la defensa del bosque, las minas, los crímenes sociales, los parques eólicos, la construcción de presas, y tienen ante sí, la defensa de la tierra, pero lo más importante, tienen la posibilidad de intervenir en la parte más delicada de la existencia: la educación de los Oaxaqueños.

En 1980, por fortuna el magisterio se pone las pilas y rompe con el control partidista de "vanguardia revolucionaria", inicia una etapa que se ha conocido como movimiento democrático. Por fortuna no es un partido político, pero si es la fuerza política organizada más importante que define el Oaxaca actual. Uno de sus atributos, es que en su seno habitan corrientes de todo tipo, pero todos tienen acceso, de acuerdo a la estructura de dirección que se han diseñado. Esto le da al magisterio un fisonomía plural, que desgraciadamente en muchos casos se revela en un fuerte grado de conflictividad, pero ésto, viéndolo desde afuera, es muy sano, para evitar todo tipo de verticalidad. La lucha magisterial es la lucha de un Oaxaca critico, cada maestro es un termómetro de lo que acaece en cada rincón del estado. Con esto no escondemos, el sin fin de vicios, que en cada particular, evidencian la ausencia de una ética profesional. Los flojos, los burócratas, los apáticos, los oportunistas, los comodinos están ahí, y por desgracia, creo que son una relativa mayoría. Si el magisterio se responsabilizara de su compromiso real, enseñar a partir de la diversidad y de los patrones culturales propios de Oaxaca y encauzara la demandas de toda su sociedad, otro gallo cantaría. Pero esto no está lejos, si cada familia presiona para que en primera , el maestro cumpla con la comunidad en la que trabaja, y nuestras autoridades comunitarias o municipales, exigieran y se responsabilizaran de intervenir en la educación. Por lo pronto ya tienen nuevos dirigentes. No estemos a la expectativa, participemos y no olvidemos que todos enseñamos, aunque no se nos pague por ello.